¿Cómo leer partituras? Empieza aquí

Leer partituras es sin dudas una de las habilidades que más te puede beneficiar a lo largo de tu carrera musical.

Puedes aprender a dominar un estilo, un instrumento pero saber cómo leer partituras musicales puede darte las herramientas para soñar con una carrera musical en el instrumento que te propongas dominar.

Lo primero que tienes que entender es el propósito de la partitura en la música y por qué es tan importante que aprendas a leer partituras musicales.

Empecemos por el propósito: la partitura es un documento que te permite saber qué se debe ejecutar en cada momento de la música, si es una nota, con qué figura, cuánta intensidad tiene que llevar esa nota, a qué velocidad, con qué instrumento e incluso qué forma de ejecución. 

Toda esta información es apenas una parte de lo que la partitura nos dice sobre la música que estamos ejecutando, por eso podemos replicar exactamente lo que compositores enel 1600 escribieron como si fuera susurrado en nuestro oído.

En este video te contamos un breve resumen de qué es una partitura o si te interesa entrar más en detalle sobre este tema, creamos un artículo con cada elemento de la partitura explicado y los tipos de partituras que podrás encontrar.

Como leer partituras desde cero

Podemos hablar horas sobre la partitura, pero tu estás aquí para aprender a leer partituras desde cero, comenzar con los puntos básicos e ir complicando hasta que ninguna partitura te sea un desafío para interpretar y ejecutar con tu instrumento musical.

El primer paso para leer partituras desde cero es identificar la clave musical, ya que sabiendo la clave podremos conocer el nombre de las notas musicales que aparecen.

¿Cómo leer el pentagrama?

Las 5 líneas del pentagrama no son nada sin las claves musicales, por eso son tan importantes para comenzar a leer el pentagrama.

Cada línea del pentagrama representa una altura, es decir una nota musical, lo que nos permite ubicar no solo que nota, sino que tan aguda o grave será esa nota.

Por ejemplo si tenemos una clave de Sol, y vemos una nota en la primera línea del pentagrama contando desde la línea que está más abajo en la hoja a la que está más arriba, esa nota podemos identificar que es un mi4, que se diferencia del Mi3 o del Mi2 o del Mi5 por tener el doble o la mitad entre uno y otro de frecuencia.

Es decir que cuanto más alta sea la frecuencia (del sonido), más aguda será la nota, mientras que cuanto más baja, más grave sonará la nota.

Es por esto que identificar las claves nos permite comenzar a determinar las notas que tocaremos porque ya sabremos qué altura tendrá cada una de ellas.

Si ya identificaste si es una clave de Sol, clave de Fa o clave de Do y en qué línea, ya puedes seguir leyendo el siguiente ítem importante en una partitura: La armadura de clave.

Aquí identificarás las alteraciones que tendrá esta partitura, si son sostenidos, bemoles o no hay alteraciones, es decir que todas las notas son naturales.

Puedes también encontrar alteraciones a lo largo del pentagrama, pero estas las denominamos alteraciones accidentales y ahora no tenemos que enfocarnos en ellas hasta que lleguemos a esa sección de la partitura.

Ya tienes una lectura básica de partituras, con las notas y sus alteraciones. Ahora toca revisar las figuras para identificar el ritmo de la partitura, para dejar de leer solo notas a leer música, gracias a combinar alturas con ritmo.

Aprender Solfeo con ejercicios para leer partituras

Aprender Solfeo puede sonar como algo feo, o por lo menos aburrido, por eso en Arthaus Escuela de Música creemos que se puede cambiar el Solfeo por el Solindo.

El solfeo no tiene que ser algo malo, es solamente la forma que se le llama al entrenamiento en la lectura de partituras, que como ya habrás entendido a lo largo de nuestro artículos y de esta página, es una habilidad esencial para todos los músicos.

Por eso queremos ayudarte con estos ejercicios a que puedas aprender a leer partituras de una forma que el Solfeo deje de ser tan feo.

Ejercicios para aprender a leer partituras rápido

Primero busca partituras de obras que conozcas, es decir que vamos a intentar solamente buscar obras que ya hayamos escuchado muchas veces. Incluso puedes consultar canales de Youtube como este, donde puedes seguir obras conocidas viendo sus partituras mientras la música suena.

Si has empezado con estos videos, el siguiente paso es intentar por tu cuenta, y tomar una partitura para seguir la música que suena, lo que te permitirá aprender a leer partituras muy rápidamente siguiendo en tiempo real las notas y las figuras.

No esperes que puedas identificar que nota es cada una que suena, solo trata de seguir donde está sonando la música en ese momento por medio de las figuras y notas.

Luego iremos afinando más para que ya pueda identificar nota a nota lo que estamos leyendo.

El siguiente ejercicio para comenzar a leer partituras más rápido es el tarareo de las notas seleccionando nota a nota que vamos tareando.

Es decir, tomamos como ejemplo la pequeña serenata nocturna de Mozart. Tienes la partitura de esta y ya has intentado seguir la partitura con la música, como en este video.

Ahora toma solamente la partitura, sin la música y comienza a tararear la melodía principal siguiente la partitura y señalar con tu dedo dónde estaría cada nota que estás tarareando.

Para esto es importante que conozcas bien la melodía para poder tararear sin problemas de memoria.

Si este ejercicio lo lograste realizar sin problemas, ahora queda empezar a ponerle nombre a esas notas. 

El siguiente ejercicio se le llama el Solfeo rezado, que consta en nombrar las notas a medida que las vamos leyendo pero sin su altura correspondiente, es decir que en lugar de decir Sol, re, sol, en el comienzo de la pequeña serenata nocturna como si estuviéramos cantando la nota, solo vamos a decir Sol, Re, Sol, pero sin cantarla.

Como quien lee la letra de una canción pero no canta la canción.

Por eso parece que estamos rezando las notas y a eso se le denomina Solfeo rezado.

Si con esto ya lo puedes hacer sin problemas, ahora si, vamos a incluir la altura de la nota, es decir que vamos a cantar el nombre de la nota mientras la vamos leyendo.

Este es el último paso para que puedas acelerar tu proceso de lectura de partituras.

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